El PGA Tour decidió dar por terminado el AT&T Pro-Am de Pebble Beach, por lo que en automático la victoria fue para el estadounidense Wyndham Clark, quien lideraba tras tres rondas disputadas en el mítico campo de California. 

Las condiciones climatológicas fueron la razón para concluir con el evento. Fuertes vientos y lluvias provocaron que la jornada dominical no se jugara, y la situación no mejoró para el lunes, lo que provocó la determinación por parte de los organizadores. 

Clark impuso una histórica tarjeta de 60 golpes durante la ronda del sábado, en su “lugar favorito”, Pebble Beach Golf Links en la península de Monterey, que lo catapultó a la cima del tablero con –lo que parecía– un día por jugar. Con un score en 17-bajo-par, contaba con una ventaja de un impacto sobre el sueco Ludvig Aberg (-16) y dos del francés Mathieu Pavon (-15).  

“Fue algo surreal. Realmente sentí como si hubiera ganado el torneo con ese putt a pesar de que era sábado”, dijo Clark el domingo por la noche, después de que se hiciera oficial su victoria en Pebble Beach.

“Creo que fue porque rompí el récord del campo. Todos me dieron una gran ovación. Honestamente, sentí como el final del torneo y eso es lo que hizo que ayer  [sábado] fuera tan único y extraño porque hubiera pensado que era domingo. Eso es lo que hizo que hoy y toda la noche anterior fueran únicos; Sentí que había ganado el torneo pero aún me quedaba una ronda más”.

Una victoria tras 54 hoyos, irónico durante el fin de semana que se estrenó la temporada 2024 del LIV Golf, en Mayakoba, que tuvo que extenderse cuatro hoyos más, en un intenso desempate entre Joaquín Niemann (campeón) y Sergio García. 

Joaquín Niemann le da justicia a Mayakoba

Clark, ahora tres veces ganador en el PGA Tour (incluido el US Open de 2023), se embolsó. 3.6 millones de dólares y 700 puntos FedExCup por su victoria en el segundo evento Signature de la campaña, pasando al tercer puesto en la FedExCup.

La próxima para del máximo circuito es Phoenix.