Rory McIlroy fue el “gran ganador” del Player Impact Program (PIP) por parte del PGA Tour, con un pago de 15 millones de dólares, más allá de los cheques que recibió durante la campaña por su desempeño (13 millones 921 mil dólares). 

Los resultados fueron revelados a los jugadores el miércoles en un memorándum del vicepresidente ejecutivo y director de jugadores del circuito, Jason Gore, y que se filtró en redes sociales, y ha causado mucha controversia, incluso por parte de algunos jugadores. 

En segundo lugar de la lista, apareció Tiger Woods, quien solo jugó un torneo y medio (The Genesis Invitational y menos de dos rondas del Masters de Augusta) y recibió 12 millones. Jon Rahm (9 mdd), Jordan Spieth (7.5 mdd) y Scottie Scheffler (6 mdd) continúan, respectivamente. 

¿Qué es el PIP?

Es un fondo de bonificación que se instituyó en 2021 para recompensar a los golfistas que
“impulsaron el compromiso y la publicidad del PGA Tour”. Durante el Tour Championship del año pasado, se comunicó que estos premios se ampliarían para llegar a más golfistas del circuito.

 Después de repartir los primeros 40 mdd del 2021, los cheques del PIP para el 2022 y 2023 se incrementaron a 100 millones de dólares y 20 jugadores obtuvieron recompensas.

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Sin embargo, no todos los golfistas están contentos…

Nathan Lashley, miembro del PGA Tour y quien expuso las ganancias, criticó la distribución del dinero: “¿Cuántos aficionados realmente conocen lo que es el PIP? Me encantaría escuchar a los fans del golf/PGA Tour si creen que estos 100 millones de dólares se gastaron bien. Hay 150-200 miembros del PGA Tour y acaban de gastar 100 millones de dólares en 20 jugadores. Parece un poco ridículo. Es hora de un nuevo liderazgo. Esto es una patada absoluta en la cara para el resto de los jugadores del PGA Tour”. 

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